Recién escuché en Reactor 105.7 la casi totalidad del artículo que José Woldenberg publicó como parte del dossier sobre la izquierda en México.
Después recordé que uno de mis amigos está suscrito a la revista impresa. Así que corrí a pedírsela, esto me llevo a descubrir dos cosas, su suscripción, según sus palabras, fue gratuita, y que en el sitio Web de la revista contiene todo los textos de la revista, completos.
No pienso hacer un resumen sobre lo que ahí escriben el mencionado Woldenberg, Marco Rascón, Luis Gonzáles de Alba o Adolfo Sánchez Rebolledo, bueno ya mencione a casi todos; así que mejor les dejo el link para que ustedes los lean: Por una izquierda corresponsable.
A grandes razgos, me he estado preguntando que es la izquierda, no su valides, porque es innegable que en una sociedad tan plural como la nuestra todos los espectros políticos deben estar presentes.
Sí, leyeron bien, una de las primeras cosas que se dejaron atrás, después de la caída del estatismo real y el Muro de Berlín es que las ideas únicas, como pensar que el neoliberalismo es la única manera, son falsas. No más dictaduras del proletariado, no más el Partido sobre el individuo.
Uno de los análisis más lucidos que he leído sobre algunos de los problemas que vivio el socialismo real, que en realidad era un capitalismo estatal, fue que no existía la competencia. Si bien en nuestro mundo la competencia es tan feroz que cada marca intenta venderte sus productos como los que te van a llevar a la: a)Felicidad
b)Adelgazar
c)Tener cabello, otra vez
d)La Felicidad
e)Ser guap@
Bien controlados pueden servirnos en verdad para algo y no sólo para perder dinero. Me viene a la mente el negocio de las leches, con eso de que Coca-Cola compró Santa Clara. Un colectivo de lecheros querétanos, bien podría venderle su producto a Alpura o Santa Clara o con un poco de apoyo gubernamental, sacar ellos su marca.
Así evitamos dos cosas, que el estado sea el dueño de TODAS las cosas, como ocurría en el mal llamado socialismo real, y que las mega compañías se queden con todo el dinero. Y no me vengan conque el Mercado es Libre, la famosa mano invisible, pues todos, hasta los neoliberales más aferrados han elaborado planes que los lleven destruir el Estado de Bienestar, vender las paraestatales, las estatales y el país entero.
La izquierda que quiero, es una donde qupan muchos mundos, donde los diferentes podamos vivir juntos, aún siendo oponentes, pero también donde no domine una sola idea, donde los trabajadores seamos dueños de los medios de producción, no el estado, no el capitalista.
Bueno, sé que falta mucho análisis para determinar qué, cómo, cúando y por qué, pero hay que hacer la lucha.
