De visita a la iglesia

Con miedo, la verdad, me acerque el día de ayer y hoy a una iglesia.
Las razones no importan para este relato, bueno sólo un poco, me dan tanta curiosidad los cristianos de la secta católica que me dije, sería bueno verlos en su entorno natural actuar sin las cadenas que un laboratorio; ¡Claro, que en las Ciencias Sociales no tenemos laboratorios!, pero se imaginan unos cuantos cristianos corriendo como pollos en una laboratorio, je.
Bueno quería verlos en su ambiente natural.
Antes de que piensen que voy a criticarlos, lo cual nunca haría, je, hagámonos esta pregunta: ¿soy un buen cristiano?, ¿me sé los ritos de mi religión?, ¿por qué a todos les da sueño asistir a la casa del señor?
Yo, por lo menos tengo excusa, al ser ateo y no creer en sus ritos pues puedo dormir sin pena ni gloria, además lo he hecho desde pequeño, pero los cristianos, simplemente en la reunión a la que asistí hoy, un padrino estaba cabeceando que daba gusto y si se quejan de la educación que Elba Esther Gordillo, mejor conocida como la Mamá de Chucky, los cristianos que me rodeaban, apenas si sabían que era un sacramento, ya ni que preguntarles por los siete que tiene su religión.
Bueno, la verdá es que resulte más cristiano que ellos, mierda, pues sabía muchas de las cosas que les preguntaron a los demás, aunque la cage con la última cena, creo que no debí decir que Maria Magdalena estaba sentada a la derecha de Jesucristo, pues se sienta a la izquierda, así qué, ante lo antes descrito amerita un:
¡ME CAGO EN DIOS!
¡Ah!, el miedo me dio pues aunque ya no soy un niño, me es muy sano desconfiar de un hombre adulto, completamente desarrollado y que ha decidido, porque su "fé" así se lo dicte, a engañar la parte más animal de su cuerpo, animal y deliciosa, pues el sexo es de lo mejor que hay en la vida y quien no lo practica, pues se atiene a que otro sea el que lo controle.
Como dice una canción de La Polla Record:

Control económico es control del poder
control mental, control sexual.
Realmente tíos, nunca he visto
religión que pretenda tanto
salvarnos a hostiasl.
¡Salve!
Opus Dei ¡Oh