A veces no sé para que sirve la policía, en México, cada municipio cuenta con una Secretaría de Seguridad Pública, encargada de mantener el orden y prevenir delitos, la policía Judicial persigue a los sospechosos e investiga los delitos.
Pero ¿qué sucede cuando los encargados de proteger la ley roban con placa?
Recuerdo que la primera vez que un oficial del orden, con su arma de cargo al lado y todo el poder municipal atrás nos invitó a mi y al Pluck a ponernos contra la pared y ser revisados, nos pusieron un cuatro, un tercer muchacho fue colocado a nuestro lado y en el momento preciso hecho a correr, los tiras suponían que tras él seguiríamos nosotros, pues no, el que nada debe nada teme y eso nos salvo.
Después, a mi y otros amigos, nos levantaron con una caguama en bolsa.
Por ser ellos menores de edad, las madres salieron corriendo y eso nos salvo, una cerveza tirada, un regaño y las voces de todas las señoras de la cuadra fue todo el espectáculo.
En mi nueva dirección, una vez unos tiras me detuvieron, para pedirme la revisión de rigor, que sino te cuidas puede terminar en plantado de evidencia, sí, lamentablemente es una de las formas más simples y sencillas para obtener un culpable.
Hace rato, apenas una hora antes, otra vez, un par de policías me dieron el alto, como venía oyendo a Iron Maiden los ignore, pero, después de todo son perros persistentes, así que volvieron a la carga. Con parsimonia dejé que me alcanzaran, el policía, de manera amable me pidio una revisión.
Esta vez fue distinta, de entrada me negué en redondo, alegando que no tenían facultad para hacer dicha revisión. Cuando llegó su compañero y repitió la pregunta, casi se atraganta al recibir mi negación, después de unos minutos, el "poli malo" alegó un bando municipal, toda la culpa la tiene el pendejo presidente... municipal, en el cual les facultaba a revisar a cualquier "sospechoso", digo el traer el pelo largo, caminar como si me esperaran en casa, en este caso cierto, y, pues la verdad no sé que más me podría poner en el campo del sospechosismo, pero esos fueron mis pecados, esta vez.
Ya medio enojado, el "poli malo" me pregunto que si traía algo, tratandome de convercer de que el que nada debe, nada teme, pero como que aquí me quería encontrar algo. Así que abiertamente les pregunte ¿qué me quieren revisar? Pues cuando subes a un avión o un camión, hay una revisión e equipaje y pasajero, y la vez anterior me revisaron la cartera, no, hasta eso no se llevaron los pocos pesos que traía, así ue les pregunté, ¿van a revisar mis mochila, mi cartera, mis bolsas del pantalón? Creo que la palabra soborno cruzo por sus mentes, pues nunca me dijeron que iban a revisar.
El "poli malo" se alejo a la patrulla, después supe que fue por una pipa, mientras que al "poli bueno" le permitía revisar mi mochila, claro que me apendeje pues le hubiera pedido que hiciera la tal revisión, con el´móvil grabandolo, bueno, espero que no haya una próxima y si la hay, pues espero no olvidarlo.
Cuando el "poli malo" regresó, me mostró la pipa. Al verla reconocí que era un trabajo bastante malo el de la tal pipa, pero me hice el inocente, después de todo ellos eran los que querían inculparme de algo, después de todo éste policía me detuvo porque me veía "sospechoso".
Después de dejarme ir: -"pareja, lo revisaste bien", me alcanzaron más adelante y se metieron en la calle que desemboca a la casa de ustedes, mis lector@s.
Bueno, unos días antes un perro de cuatro patas se me lanzó a mordidas, al parecer sin razón, aunque a mi me late que su compañera, también de cuatro patas, está esperando camada.
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