Dice el dicho que el hubiera es el pendejativo del verbo ya te chingaste.
Hace muchos años, y no precisamente en una Galaxia Muy, Muy Lejana, existió una familia que un buen día ayudo a dos de sus integrantes a comprar una casa.
Después de múltiples arreglos, el prestámo de la hermana de uno de ellos, de que los papás de él pusieran la cara, de que todos fueran a verla... al final la compraron.
Se supone que la educación obtenida entre todos era igual al valor de Pi x la velocidad de la luz... ya en serio. Ninguno de ellos notó que el vendedor repetía con regularidad una palabra UDIs. Que en español mexicano significan Unidades de Inversión, un invento de la economía neoliberal para, según esto, proteger la inversión de los compradores de... casas.
Claro que con una crisis económica mundial, quizá los UDIs resistieron, pero no la economía de esta familia, ahora de cuatro integrantes, que literalmente debió dejar de pagar su preciosa casa.Y dejar de pagar conlleva otro asunto, la posibilidad de ser expulsados de lo que todos ellos consideraban un sitio seguro. Claro, para ello deben pasar muchos años, juicios, llamadas intimidantes, visitas de los cobrones.
Así que esta es la historia.
Los errores son muchos, empezando por el cobro en UDIs.
Bueno, ahora a rehacer su vida en un nuevo sitio, en una nueva casa y con la misma familia pequeña de cuatro...
Sólo hay una pregunta, ¿de haber vencido al fraude electoral del 2006, ahora la historia sería distinta? Otra vez, el hubiera es el pendejativo del verbo ya te chingaste...
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