Sería pecar de presunción si digo que soy un crítico de cine.
Claro que veo cine, en casa (DVDs o canales de TV) además de leer sobre cine, platicar de cine y, en alguna ocasión, soñar con el Cine.
Es obvio que voy a las salas de proyección, ahora, con trabajo y dinero, menos que antes, cuando sólo era un pobre estudiante de clase media.
Un ejemplo, las Muestras de la Cineteca, en las salas de la UNAM, fueron mi refugio en diversas ocasiones, las más entre las butacas, aunque Profundo Carmesí la vi desde el cuarto de proyección, gracias a mis amigas Montse y Lore, me pregunto qué habrá sido de ellas.
Una de mis películas favoritas es esta, del director italiano Giuseppe Tornatore, el Nuovo Cinema Paradiso, por años ha simbolizado lo que me gusta del cine, la magia que aparece apenas se apagan las luces y empieza a correr la cinta, aunque ahora, con los nuevos proyectores digitales, es muy posible que cada vez haya menos cines de celuloide y más digitales.
La historia, seguro ya la conocen, de no ser así los invito a buscarla, en la Web podrán encontrarla, ya saben en los famosos torrents, así como en el sitio de renta de su preferencia, más si éste cuenta con una zona para el cine de "arte".
Además, el DVD es barato como lo puede ser un disco en peligro de extinción, así que por favor no dejen de ver esta obra maestra del cine.
El Señor de los Anillos
Lo confieso, todo este choro sobre las 24 imágenes por segundo, es solo un preámbulo hacia otro punto.
Fue al salir de la preparatoria que un amigo me prestó sus libros del Señor de los Anillos, con avidez, no hay otra forma de decirlo, los leí hasta el momento en el cual Frodo se embarca hacia las tierras imperecederas.
Obra maestra me dije, y seguí con mi vida.
Tiempo después, el Cine Club Ciencias presentó El Señor de los Anillos, animación de Ralph Bakshi, función a la cual no pude asistir por razones nebulosas (algún examen, falta de dinero o tiempo, quizá me entere de la proyección días después, cosa normal en esos días) sin embargo, no desesperé, ya había leído la obra completa, los tres libros, y lo más seguro es que en poco tiempo la podría volver a ver.
Con los meses llegó otra proyección, ahora se trataba de una película Gore de un tipo llamado Peter Jackson, neozelandés él, el film se tradujo al español como Mal Gusto (Bad Taste en su idioma original) y nos muestra una obra loca, sincera, llena de chistes de humor negro, muy negro, en otras palabras una obra maestra del cine tipo B.
Lo sé, soy fan.
Aquí vamos a acortar el post, pues si han llegado a este punto, no es justo torturarlos.
Se abre la cortina
Tolkien, primero escribió el Hobbit y también hay película animada.
Sin embargo, las cosas se dieron de manera distinta, Peter Jackson, primero dirigio El Señor de los Anillos, y ahora lo hará con el Hobbit. Además, pronto veremos las versiones extendidas en Blu Ray, con lo cual podemos decir que se pondrá de moda, otra vez, la lucha por la Tierra Media.
Y a mi, como lector de Tolkien, aficionado al cine, y seguidor de Jackson, sólo me resta decir que fue un acierto que fuera Peter Jackson, y no Disney, como el mismo Tolkien temía, quien se encargo de hacer tan fastuosa producción. La dirección es impecable, pero la adaptación, bueno, les contaré que entré mis amig@s lectores de Tolkien no he hallado alguien que diga que Peter Jackson destrozo el Señor de los Anillos.
Supongo que habrá quién lo diga, pero en mi círculo, aún no ha aparecido tal personaje, el cual me gustaría conocer, si he de ser sincero.
Hasta la próxima, que he dejado muy olvidado este mi querido Blog.
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